Otra jornada negra en Irak. Al menos 26 personas murieron ayer víctimas de tres coches bomba que la resistencia iraquí hizo estallar en Bagdad y Mosul (norte), mientras que en la ciudad de Faluya nuevos ataques aéreos "de precisión" llevados a cabo por la aviación estadounidense hicieron estragos entre la población civil. El caos y la violencia que reinan en el país hicieron subir el balance de fallecidos a al menos 40, muchos de ellos mujeres y niños.

Cerca de las nueve de la mañana (hora iraquí), un coche bomba estalló cerca de un centro de reclutamiento de la Guardia Nacional, donde estaban concentrados casi 400 nuevos reclutas, según algunos testigos. El centro policial está muy próximo a la entrada oeste de la Zona Verde, el área más protegida de la capital, sede del Gobierno interino y de las embajadas de Estados Unidos y del Reino Unido. En un primer balance de víctimas, fuentes del Hospital Yarmuk de Bagdad cifraron en 15 los fallecidos y en más de 80 los heridos.

CAMION CON EXPLOSIVOS Una hora más tarde, en el este de la capital, otro ataque de la resistencia segó las vidas de al menos otras 6 personas, e hirió a 17. En esta ocasión, un pequeño camión cargado con explosivos estalló al paso de un convoy formado por cuatro vehículos todoterreno de color negro que salían de un complejo hotelero. "Vi una cabeza en un lado y una pierna en otro. Ha sido una atentado suicida", aseguró a la agencia Reuters un testigo. El atentado tuvo lugar en la calle de Saadún, a la altura del Hotel Bagdad, lugar de residencia de muchos occidentales que trabajan para empresas contratadas por el Gobierno.

También en la capital fueron asesinados a tiros un director general y una funcionaria del Ministerio de Ciencia y Tecnología. El Ejército de EEUU, entretanto, informó de que dos soldados murieron el domingo en Bagdad tras ser atacados con armas de fuego en un control militar.

Como ocurre casi a diario, la violencia se extendió a otras ciudades. En Mosul, 5 personas murieron, entre ellas 2 niños, y 11 resultaron heridas, tras estallar un coche bomba junto a una escuela en el sur de la ciudad. Fuentes estadounidenses señalaron que en el automóvil viajaban dos individuos y que, probablemente, la deflagración se produjo antes de tiempo, al no existir ningún objetivo militar claro en la zona del ataque.

CONTRA LOS REBELDES También murieron niños ayer en Faluya, en dos ataques de la aviación estadounidense. Las primeras bombas cayeron a la una de la madrugada en el céntrico barrio de Jumhurihah. De las nueve personas fallecidas, cuatro eran niños y tres mujeres, según un médico del Hospital General de la ciudad, que cifró en 12 los heridos, todos ellos civiles.

Tres horas después llegó el segundo ataque, en el barrio de Shuhada, donde murieron dos personas. El mando estadounidense indicó que los objetivos de la ofensiva eran un edificio donde 25 insurgentes almacenaban armas y municiones, y una reunión de seguidores del jordano Abú Musab al Zarqaui, supuesto jefe de Al Qaeda en Irak.

ASESINADO UN JEFE DE POLICIA En Ramadi, una bomba estalló al paso de un convoy militar estadounidense. El balance fue de dos muertos y seis heridos, ninguno estadounidense, según la policía iraquí. Cerca de Baquba, unos desconocidos mataron en una emboscada a un alto jefe de policía de la zona, mientras que una niña de 13 años murió y seis personas resultaron heridas en un ataque con morteros.