La victoria del solialista José Sócrates es la victoria del AVE extremeño. El Tren de Alta Velocidad, que la candidata conservadora de la oposición portuguesa, Manuela Ferreira Leite, frenaría si llegaba al gobierno de su país, sigue en marcha. Al menos es la postura defendida durante la campaña electoral del candidato socialista que vuelve a conseguir la victoria en el país vecino. Pero el AVE no es lo único que la región se jugaba ayer en las urnas, otras de las inversiones en infraestructuras que Ferreira Leite pretendía recortar podría afectar también a la autovía Lisboa-Madrid, que enlazaría con el tramo extremeño hacia la capital. G. MORAL