Los líderes de la UE tenían previsto acordar anoche conceder a Macedonia el estatuto de país candidato a la adhesión, en reconocimiento a las reformas políticas emprendidas, que han permitido estabilizar el país tras haber estado al borde de la guerra civil.

La UE, no obstante, deja claro en el proyecto de conclusiones que la eventual apertura de negociaciones quedará supeditada no sólo a los progresos del país para cumplir los criterios de adhesión, sino en especial al resultado del debate que emprenderán el año próximo los Veinticinco sobre el futuro proceso de ampliación.

Francia convenció a sus demás socios durante la última semana de evitar cualquier signo que pudiera interpretarse como el inicio de una nueva ola de adhesiones a la UE hasta que estuviera resuelta la reforma institucional necesaria para funcionar con eficacia con 25 o 27 estados miembros, bloqueada por la parálisis constitucional. Francia recalcó durante la negociación del compromiso que en la definición de la nueva estrategia de adhesión deberá tenerse en cuenta la capacidad de absorción de la UE de nuevos miembros y el reparto equitativo de los costes de las sucesivas ampliaciones entre los antiguos 15 estados miembros.

La cumbre también tenía previsto prorrogar hasta el 31 de diciembre del 2010 la actual lista provisional de productos y servicios a los que puede aplicarse el tipo de impuesto sobre el valor añadido (IVA) reducido y permitir incluir los restaurantes en ese tipo reducido a los países que no lo tenían, como Francia.

La vigencia de la lista provisional expiraba el próximo 31 de diciembre por lo que, sin la prórroga, España y los demás países habrían tenido que subir el IVA en numerosos productos y servicios a partir del próximo mes de enero ante el desacuerdo de los Veinticinco sobre la elaboración de la lista definitiva.