Tanto los seis países negociadores como Irán aceptaron una propuesta por la que el uranio débilmente enriquecido (al 3,5%) de que ya dispone Teherán sea transportado a un tercer país donde se enriquecería "al nivel necesario", según explicó en rueda de prensa el jefe de la política exterior de la UE, Javier Solana. Este material sería después devuelto a Irán. Solana anunció una "reunión técnica" el día 18 para abordar esta cuestión.