Cualquier canción, cuando se reproduce a todo volumen durante horas mientras quien la escucha está preso en una pequeña celda, digamos que en Guantánamo, se acaba convirtiendo en una tortura psicológica. Por ese motivo, varios grupos y cantantes cuyas canciones se han usado en prisiones de EEUU en la guerra contra el terror participan en la campaña Cero Decibelios (impulsada por la organización británica Reprieve) para exigir a las autoridades estadounidenses que dejen de usar sus temas.

A juzgar por la lista de canciones más usadas que ha publicado Reprieve, el repertorio es muy variado. En el top ten hay dos canciones de AC/DC (Hell´s Bells y Shoot to thrill ), Enter Sandman de Metallica, Bodies de Drowning Pool y White America de Eminem. Las letras o los títulos pueden evocar algún mensaje, aunque a veces contradictorio. Es el caso del Born in the USA de Bruce Springsteen, que denuncia la guerra de Vietnam. Pero hay otras elecciones curiosas, como Barrio Sésamo o I love you , del programa también infantil Barney and friends . Las hay basadas en el volumen de los decibelios (canciones de Queen, como We will rock you , y de Pantera, Limp Bizkit, Red Hot Chili Peppers y Rage Against the Machine) y otras que, si no fuera porque se trata de torturas, podrían dar lugar a bromas, como las de Britney Spears y Christina Aguilera.

IMPOSIBLE PREPARARSE Reprieve ha emitido un vídeo de un preso de Guantánamo, Ruhal Ahmed, en el que describe el efecto que tiene sobre los prisioneros la continua música a un volumen altísimo. "Antes de la música, podías intentar concentrarte en cualquier otra cosa. Pero la música te hace sentir como si te volvieras loco". "Puedo soportar ser golpeado. Una vez aceptas que te van a golpear, te puedes preparar mentalmente. Pero cuando eres torturado psicológicamente, no puedes prepararte", añade Ruhal Ahmed.