El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no está solo en su cruzada contra los medios de comunicación. Su vicepresidente, Mike Pence, le apoya sin fisuras y a su paso por la sede de la Alianza Atlántica ha dejado claro que no dudarán en seguir denunciando cualquier hecho que consideren manipulado. “Cuando los medios se equivoquen, el presidente Trump llevará el asunto directamente a los ciudadanos estadounidenses para esclarecer los hechos”, ha asegurado desde la OTAN.

Ha sido la única parada durante su viaje institucional a la capital comunitaria en la que Pence ha aceptado responder a preguntas de los periodistas, una muestra clara de cual es la institución que más pesa a ojos de la nueva Administración que gobierna en la Casa Blanca. “Pueden estar seguros de que el presidente y yo apoyamos una prensa libre e independiente, pero seguiremos llamando la atención sobre los medios cuando manipulen los hechos”, ha avisado subrayando que será el propio Trump quien continúe su particular cruzada tuitera.

“Cuando los medios de comunicación se equivoquen el presidente Trump denunciará la situación directamente ante el pueblo americano para dejar las cosas claras”, ha anunciado. El multimillonario culpó la semana pasada a filtraciones ilegales y a los medios de comunicación de difundir las “noticias falsas” que a su juicio provocaron la renuncia de su asesor de seguridad, Michael Flynn, y Pence este lunes ha cerrado filas con su jefe. “Lamentó que los hechos atribuidos a Flynn fueran inexactos. Apoyo la decisión del presidente sobre su dimisión. Fue la decisión adecuada”.

MÁS GASTO MILITAR

Pero el grueso de la breve rueda de prensa posterior a su visita a la Alianza Atlántica se ha centrado de nuevo en el gasto militar y en el reiterado llamamiento de la nueva administración a los países aliados europeos para que aumenten sus inversiones en defensa de aquí a finales de 2017. “El presidente espera progresos reales para finales del 2017”, ha advertido, recordando que EEUU cumplirá pero que la defensa europea también requiere un compromiso fuerte de los europeos. “No sé cuál es la respuesta, pero sé que la paciencia del pueblo estadounidense no va a durar siempre”, ha advertido preguntado sobre la posibilidad de que Estados Unidos modere su compromiso.