El Departamento del Tesoro estadounidense anunció ayer el bloqueo de los bienes de Al Aqsa TV, la televisión de Hamás, así como los de un banco controlado por el Movimiento de Resistencia Islámico. Se trata de una decisión simbólica en la medida en que Hamás ya es objeto de sanciones por el mismo departamento, ya que este movimiento figura en la "lista de las organizaciones terroristas" de las autoridades estadounidenses. La medida se produce justo cuando el presidente Barack Obama afirmaba que no existía una crisis entre EEUU e Israel, pese a los virulentos reproches verbales entre Washington y Tel-Aviv por las construcciones de nuevos asentamientos.

La medida incluye el bloqueo de los bienes de las dos entidades, así como la prohibición a cualquier estadounidense de llevar a cabo transacciones con ellas.