José Luis Rodríguez Zapatero mostró ayer su solidaridad al presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbás, ante el que volvió a condenar la reacción "desmedida" de Israel y pidió una Palestina liderada "desde la razón" y no desde la acción violenta.

Tras una reunión de una hora con el líder palestino en la Moncloa, Zapatero descartó en rueda de prensa que sus críticas a la actuación del Gobierno israelí impidan la capacidad de interlocución con Tel-Aviv y el papel mediador que ha ofrecido a las dos partes. "A un país amigo como Israel hay que decirle la verdad de lo que se piensa", aseguró el presidente. "Eso da más autoridad que andar jugando con las palabras. ... Si uno piensa que esa solución militar no es la solución, hay que decirlo", añadió.

LLAMADAS DE MORATINOS El lunes, el primer día que comentó la operación israelí en Gaza pese a que la ofensiva iba ya por su décima jornada, Zapatero ofreció al Ejecutivo español y a Miguel Angel Moratinos, con estrechos vínculos con los líderes de la región, para mediar entre los dos bandos, y anunció que esta semana hablaría con el primer ministro israelí, Ehud Olmert, y con Abbás. Con el presidente de la ANP pudo departir más de dos horas ayer, pero con Olmert anoche todavía no había mantenido esa conversación telefónica.

Fuentes de Moncloa aseguraron que esa llamada se producirá probablemente a lo largo del día de hoy y descartaron que teman cierta tensión por parte de Olmert como consecuencia de los comentarios de Zapatero. Un portavoz de la embajada de Israel aseguró que las relaciones son "fluidas" y explicó que Moratinos ha hablado en los últimos días varias veces con su homóloga, Tzipi Livni, y el titular de Defensa, Ehud Barak. "Habla de tú a tú, de una manera espontánea. El nivel de diálogo es altísimo con los líderes de la región", añadió un portavoz de Moratinos.

Precisamente, ayer por la mañana, cuando Moratinos se enteró del lanzamiento de cohetes desde el Líbano, llamó al primer ministro, Fuad Siniora, quien le aseguró que hará lo posible "para evitar cualquier escalada que podría tener consecuencias desastrosas" para el país, donde hay desplegados 1.100 soldados españoles.

"HECHO AISLADO" Abbás explicó que confía en que el disparo de cohetes "sea un hecho aislado que no complique más las cosas". "Queremos paz y estabilidad para nosotros y para los israelís, para vivir juntos unos al lado de los otros con estabilidad y seguridad", declaró.

Ambos líderes dieron su apoyo al plan para lograr una tregua en Gaza elaborado por Francia y Egipto, a cuya capital viaja hoy Abbás para entrevistarse con el presidente, Hosni Mubarak.

Zapatero se comprometió a trabajar en las "iniciativas posteriores" que sean necesarias para garantizar el alto el fuego y la distribución de la ayuda. Preguntado sobre si apoya contactos entre la UE y Hamás, el presidente aseguró que hay que hacer "todos los esfuerzos posibles" ante las organizaciones palestinas para que el alto el fuego sea eficaz.

Zapatero también anunció ayer que el Gobierno hará una nueva contribución de cinco millones de euros a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNWRA), que se añade al millón y medio de euros desembolsado para proveer de medicamentos y material al Hospital de Gaza.