La gimnasta extremeña Laura Campos, que ha participado hoy en la ronda de clasificación de los Juegos de Pekín, ha acabado su actuación gratamente sorprendida por su nota en salto (14,200), la más alta de cuantas obtuvo, y pensando ya en los Juegos Mediterráneos del año próximo. Campos ha obtenido una puntuación de 55,025 que la sitúan provisionalmente duodécima, aunque faltan por competir tres cuartas partes de las inscritas, por lo que es improbable que entre en la final. "Siempre se espera algo más, pero yo estoy muy contenta", ha comentado sobre sus segundos Juegos Olímpicos. "Lo que estaba entrenando mejor era la barra, y me ha salido bien, pero lo que no me esperaba era una nota tan alta en salto", ha indicado. Campos, que se lesionó en una rodilla poco antes de venir a Pekín, ha manifestado que no le ha molestado nada y que sólo la lleva vendada "por seguridad". Se queda en Pekín hasta el día 21, con la esperanza de "pasear un poco", y tras unos días de vacaciones "a seguir entrenando para los Juegos Mediterráneos" que se disputarán en Pescara (Italia) en 2009. "Me perdí por una lesión grave en la rodilla los anteriores", ha recordado Campos. De lo que ha visto hoy en el Estadio Nacional, a Campos le han parecido "impresionantes las chinas en asimétricas".
