La corredora aragonesa prestó declaración el miércoles pasado en una comisaría de Lleida, según confirmaron ayer los asesores de Maribel Moreno, que dio positivo por EPO en Pekín. La ciclista compareció como testigo, ya que la ley antidopaje española persigue a las personas que suministran productos prohibidos. Moreno y su entrenador y compañero, Carlos Hernández, se han recluido en un apartamento de la costa tarraconense. El abogado que la representa se ha contratado al margen del sindicato de ciclistas.