Tras llegar a una final olímpica, Virginia estaba ayer más tranquila. Es lo que tiene la edad y los títulos acumulados. Con 35 años, Virginia Ruano es una estrella de los dobles del tenis femenino. Pero Anabel Medina, más joven que su compañera (ella tiene 26 años), descargó la adrenalina acumulada tras una agónica y caliente semifinal ante la pareja china formada por Yan Zi y Zheng Jie (6-4, 7-6 (7/5). Ambas han derrotado ya a un país, China, y ahora les espera un par de hermanas: las norteamericanas Serena y Venus Williams.

"¡Mamá, te llevo la medalla!", soltó Medina, la valenciana. "Me he puesto a hacer tonterías para dejar de estar nerviosa. Y al ganar grité a mi madre. Hay que ir a por todas", recordó la tenista porque consideraba que se había dado el paso más difícil. "Al entrar en la pista fue impactante. Estaba llena y con un ambiente muy caliente, pero ya nos avisaron", dijo Medina, tras explicar que "una medalla olímpica tiene más repercusión que un Grand Slam. En dobles, claro". Ruano y Medina ganaron en Roland Garros, pero no tuvieron tanta trascendencia como esta.

MAXIMA CONFIANZA Por eso, ambas lo tienen claro. "No se nos puede escapar el oro", contó Ruano, la madrileña que lleva casi 18 años dando raquetazos por todo el mundo. "No me conformo con la plata, que en Atenas fue amarga y lloré mucho tras perder el oro. No quiero vivir lo mismo", aseguró recordando el dolor que le produjo perder la final hace cuatro años con Conchita Martínez. Ahora ha cambiado de pareja, y también quiere cambiar de vivencia. "Las Williams son unas adversarias peligrosas. Ya perdimos en Wimbledon con ellas y después le dije a Medina que a lo mejor eso nos servía de experiencia para los Juegos. Vamos a ver", añadió.

FEDERER, ORO EN DOBLES El oro en el doble femenino espera dueño, mientras el masculino corresponde a Suiza. O lo que es lo mismo a Federer, quien logra, al fin, su primera medalla olímpica. Junto a su compatriota Wawrinka, derrotaron ayer a los suecos Johansson y Aspelin en cuatro sets (6-3, 6-4, 6-7 (4-7), 6-3) permitiéndole así disfrutar de la gloria olímpica tanto tiempo buscada por el suizo. "Es un momento muy importante de mi carrera, los Juegos son como Wimbledon para mí", aseguró Federer. Algo así sintió el serbio Novak Djokovic, que se llevó el bronce en individuales al derrotar al norteamericano James Blake en dos sets (6-3, 7-6 (7-4). "Es un bronce que brilla como si fuera de oro", dijo Djokovic.