Con un sencillo acto se inauguró ayer la estatua dedicada al padre Agustín Panero, que contó con asistencia de unas quinientas personas, en la barriada de Nuestra Señora de La Antigua. También acudieron el alcalde, Pedro Acedo, concejales del PP y PSOE, el arzobispo emérito, Antonio Montero y familiares del Padre Panero.

Además de la inauguración de la estatua se cambiaron el nombre de dos calles. Así, la calle Yucatán pasó a llamarse calle del Perpetuo Socorro, por estar allí ubicada la iglesia del mismo nombre; y la calle Los Alamos se cambió por la de calle Padre Panero.

El homenaje comenzó con una misa a las doce del medio día para pasar a la rotonda donde se ha ubicado la estatua del Padre Panero. La estatua ha sido realizada por el escultor emeritense Eduardo Zancada, también presente en el acto. La escultura, colocada en una rotonda de la avenida Juan Carlos I, tiene 2.05 metros de altura y pesa una tonelada. Está colocada sobre un pedestal de piedra de 2.000 kilos de peso que lleva una inscripción: "Al Padre Panero, Redentorista. 1926-2002". El costo de la obra es de 30.000 euros, de los que faltan por recaudar 3.000 euros.

ARZOBISPO En su intervención, Antonio Montero indicó que "estamos antre un nuevo protector que no tiene la oficialidad de la Iglesia y espero que la tenga algún día".

Por su parte, el Padre Miguel Combarros glosó la figura del Padre Panero y recordó como se pasaba horas ante los enfermos y moribundos para reconfortarlos espiritualmente y la entrega de todo lo que tenía a los pobres.

La iniciativa de eregir un monumento en recuerdo del Padre Panero fue una iniciativa popular que surgió al morir éste en junio del 2002. La iniciativa contó con el apoyo del ayuntamiento.

Para llevar a la práctica esta idea se creó una comisión organizadora compuesta por Francisco Javier Gallego, de la Hermandad de la Vera Cruz; Blas Benítez, de la Asociación de Comerciantes de La Antigua; Luis Valiente, por la Asociación de Vecinos Nuestra Señora de La Antigua; Manuel Jaramillo, de la Asociación Folclórica de La Antigua; Tomas Muñoz, consejero pastoral de la iglesia del Perpetuo Socorro e Idefonso Contador y Ana María Milanés, en representación de los grupos parroquiales. La presidía el párroco Manuel Matute.

La inauguración de la estatua fue aplazada tres veces. La primera fecha era la del 27 de junio, luego se pospuso a septiembre, a octubre y finalmente se ha podido inaugurar ahora.