La nueva plaza peatonal del teatro y anfiteatro romano quedó ayer abierta al público, con lo que se completa la segunda fase de una obra donde se construyó primero un restaurante, aseos públicos, una tienda y una taquilla, y que han creado un área de servicio y un espacio de acogida al turista.

La plaza, cuyas obras se iniciaron en el mes de mayo, ha contado con un presupuesto de 237.420 euros con cargo al Plan de Excelencia Turística de Mérida a propuesta del ayuntamiento.

La inauguración corrió a cargo del alcalde de Mérida, Pedro Acedo, acompañado de concejales de su equipo y representantes de las instituciones que forman parte del plan de excelencia, Gobierno y empresarios, ya que de la Junta no había nadie en este acto.

EXTENSION

En cuanto a las características de la plaza, proyectada por el arquitecto Arsenio Rica, ocupa una extensión de 1.700 metros cuadrados, de los que 1.026 están cubiertos con losa de granito y unos 469 de suelo de tierra. También tiene una fuente de mármol con una serie de pequeños surtidores a ras del suelo y seis bancos rústicos de granito.

En el lugar donde se ha construido la plaza había antes aparcamientos, de los que quedan los árboles. Además se plantarán más en otoño.

En su intervención, Pedro Acedo señaló que la plaza será ampliada por la calle Octavio Augusto, que se ha quedado en fondo de saco, y afirmó que se realizará "con el dinero de las autoridades con más competencias turísticas o con el de los emeritenses", aseguró.

El alcalde mostró su satisfacción por el resultado de la obra en una zona situada junto al monumento histórico "más importante de España", como el teatro Romano, a la que anteriormente podían acceder los vehículos y "esto era impropio de una ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad", especialmente por su cercanía al Museo Nacional de Arte Romano y al teatro romano, y recordó que esta obra estaba pendiente desde el año 1999.

Por otro lado destacó que el próximo proyecto del plan de excelencia será el de cambiar el suelo de losas de la calle Santa Eulalia por granito.