Los cambios en las líneas de autobús urbano serán inminentes. La Junta de Gobierno Local aprobó ayer el inicio del expediente para la reestructuración del servicio de transporte público, cuya actividad se reducirá en casi un 30% para que el ayuntamiento no tenga que seguir costeando el déficit que genera el servicio. El desequilibrio viene motivado por el exceso de kilometraje de los autobuses respecto a lo recogido en el contrato con Vectalia y se traduce en un coste extra de casi 150.000 euros al año (12.400 mensuales) que hay que abonar a la empresa al margen de los 800.000 que recibe por la concesión.

Según explicó la portavoz municipal, Carmen Yáñez, la comisión técnica que estaba estudiando los cambios ha finalizado ya sus trabajos. Sin detallar aún las paradas, líneas o barrios que podrían verse afectados, explicó que se va a plantear un servicio de 517.890 kilómetros anuales, lo que supone una reducción del 27% (191.812 Km) sobre los 709.702 actuales. La edil reconoció que se trata de un ajuste importante, pero defendió que «no llega al cien por cien» de lo recogido en el contrato que hizo el PP, que estipulaba un recorrido de 354.600 kilómetros anuales y daba de plazo hasta el año 2014 para abordar la reestructuración. «Esto equivaldría a un 50%, una cantidad leonina que hubiera dejado el servicio al mínimo», alegó.

La portavoz afirmó que desde el consistorio se han tratado de buscar otras vías, pero ninguna es posible ya que la reestructuración está recogida en el contrato y el propio Tribunal de Cuentas ha advertido ya al consistorio de que tiene que cumplirlo. En ese sentido, criticó que el PP «firmara el compromiso (de reducción) pero después lo dejara en el cajón para que el que venga detrás lo arregle».

Respecto a los cambios que se aplicarán en líneas y paradas concretas, no quiso avanzar nada a la espera de conocer la propuesta definitiva en los próximos 10 días, pero sí dijo que la idea es que puedan aplicarse en verano, aprovechando las vacaciones, para que los usuarios puedan adaptarse con más facilicidad. Pese a la reducción, la portavoz reiteró que la reorganización de las líneas también se aprovechará para dar un servicio «más fluido y práctico, que responda a una ciudad del siglo XXI» y que permita llevar el servicio a nuevas zonas, como el polígo industrial El Prado.

En respuesta a las acusaciones de Yáñez, el portavoz del PP, Pedro Acedo, recordó que cuando llegó al gobierno en 2011 «los autobuses urbanos costaban dos millones de euros» y que gracias a la externalización se logró rebajar ese coste sustancialmente.