En la toma de posesión del vicepresidente del gobierno autónomo, Ignacio Sánchez Amor, de la consejera de Fomento, Leonor Martínez-Pereda, y de la consejera Portavoz, Lola Pallero, estuvieron acompañados, no sólo de políticos sino de familiares y amigos.
El mejor autor de teatro de este país Manuel Martínez Mediero, que pronto veremos alguna obra suya en la televisión nacional, saludaba a la madre y mujer de Ignacio Sánchez Amor, que estaba radiante. No era para menos. Y los padres de Leonor Martínez-Pereda, buenos amigos de hace muchos años, su padre es de las personas más querida y apreciadas en Badajoz y en toda Extremadura. Y amigos de familiares de Lola Pallero, cuyo padre murió hace un año y le hubiera encantado ver a su hija triunfar en la política regional, se lo merece.
Después de prometer sus cargos, no juraron, y para lo de jurar hay un precioso artículo de Francisco Pi y Margall del 29 de octubre de 1904 sobre el catolicismo, que es toda una lección de comportamiento del ser humano, años después de ser Presidente de la I República.
Juan Carlos Rodríguez Ibarra, presidente de la Junta de Extremadura, tuvo unas palabras para la recién nombrada, y presente en el acto, ministra de la Vivienda, María Antonia Trujillo, que cada día está más guapa, y a los nuevos cargos que ha nombrado para trabajar a su lado.
Ibarra dijo que ahora estaba más ilusionado que nunca y habló de su región, del avance que se ha tenido, de lo que se ha realizado y de su optimismo ante el futuro que tenemos los extremeños. Ibarra, con su mano derecha vendada manejó mejor la izquierda en su discurso, normal.
Al final los consejeros felicitaron a sus nuevos compañeros en el gobierno autónomo. El acto fue entrañable, sobre todo para los que deseamos lo mejor para los amigos.
