La asociación de vecinos de La Antigua quiso ayer «alzar la voz» contra el cierre de las oficinas bancarias que afecta a la barriada. Según denunció, hace unos días «desapareció sin explicaciones» la oficina de Liberbank (antes Caja Extremadura) y ahora lo hará Caja Badajoz, perjudicando sobre todo a los mayores. El colectivo muestra su «tristeza» por la reestructuración bancaria, pues los vecinos «llevaban muchos años trabajando con las dos cajas y el trato era personal y cercano, nos conocían por nombre y apellidos», afirma.

Así, critica que ahora las personas que necesiten ir al banco tengan que desplazarse al centro y se pregunta qué será de esos trabajadores «que han dado todo y mucho más de lo que les correspondía». Como medida de protesta, la asociación cancelará su cuenta en Caja Badajoz el mismo día que cierre la oficina.