El Liceo ha aprobado la venta de la totalidad del edificio de la sociedad, que ocupa una superficie de 2.489 metros cuadrados en la calle Santa Eulalia por un precio de 1,8 millones de euros. En concreto, se realizará mediante la permuta de dos plantas de un bloque de nueva construcción en la esquina de las calles Cervantes y Camilo José Cela, valoradas en 800.000 euros, más un millón de euros.

Esta decisión será impugnada al menos por uno de sus socios, que ayer manifestó a este diario que no se opone al traspaso del edificio, necesario para sanear las cuentas de la sociedad, sino a que se realice un mal negocio con la venta de este inmueble, que ya en 2005 se aprobó la operación realizada con la inmobiliaria Ajimer por un precio de 3,2 millones. Entonces no se contemplaba la venta de la totalidad del inmueble, sino que se reservaba una parte ubicada en la calle Moreno de Vargas de unos 300 metros cuadrados.

Este socio, Dionisio Blanco, quiere parar a toda costa lo que él considera un pelotazo y por ello su abogado, Rafael Camps Pérez del Bosque, ya tiene preparada la demanda judicial. Blanco también ha anunciado que impugnará la Asamblea General Ordinaria celebrada el lunes para aprobar la venta del inmueble, al considerar que hubo irregularidades en la convocatoria, entre ellas, que no fue avisado de la misma en el plazo correspondiente y que no se incluyó en el orden del día un punto para los ruegos y preguntas.