El Ayuntamiento de Mérida construirá este año una treintena de panteones y un nuevo módulo de nichos en el cementerio municipal. La delegada del área, Silvia Fernández, explica que esta medida del equipo de gobierno dará respuesta a una demanda de los ciudadanos y que su puesta en marcha está supeditada a la aprobación del presupuesto municipal para 2016.

La previsión que maneja el Gobierno local es que antes del mes de junio puedan estar construidos los panteones. "Anteriormente se subastaba el terreno para los panteones, pero lo que nosotros queremos es construirlos en bruto y adjudicarlos directamente", apunta la edil, quien recuerda que la construcción de panteones llevaba paralizada desde hace varios años. En esta línea, Fernández sostiene que en la actualidad quedan unos 140 nichos libres, pero que aún así está previsto acometer un nuevo módulo con unidades de enterramiento para final de año. "Creemos que es suficiente para la demanda que hay en el cementerio", afirma la delegada.

Por otra parte, operarios de la delegación de Parques y Jardines han llevado a cabo actuaciones de adecentamiento en el camino trasero de acceso al camposanto emeritense, ya que se encontraba "bastante dejado y embarrado". En este sentido, la edil del cementerio señala que también se han reparado los techos de varios módulos de nichos que se volaron hace unas semanas debido a las malas condiciones meteorológicas. Asimismo, informa de que el equipo de gobierno ha atendido la demanda de un ciudadano que "llevaba años intentando que le arreglaran un acceso al mausoleo que tenía un desnivel en la entrada", lo que ocasionaba que le entrara el agua.

Sobre este asunto, cabe recordar que la Junta de Gobierno Local concedió el pasado mes de febrero una autorización al Proyecto para la Recuperación de la Memoria Histórica para realizar una cata de restos humanos junto a la tapia sur del cementerio, zona que no se analizó cuando se llevó a cabo la excavación de cuatro fosas en el año 2008. Según explicó el coordinador del proyecto, Cayetano Ibarra, el objetivo es constatar y documentar la existencia de restos humanos en la zona para después valorar si es conveniente excavar y proceder a la exhumación de los huesos si los hubiera. En concreto, la actuación se llevará a cabo en la tapia sur del cementerio y en el jardín colindante.