El Ayuntamiento de Mérida decide la demolición, con carácter "urgente" por "ruina inminente" del inmueble situado en el número 55 de la calle Marquesa de Pinares de la ciudad, ante su estado de "abandono y deterioro", el cual volvió a "empeorar con las últimas lluvias".
Según la agencia Europa Press, la Delegación Municipal de Urbanismo tenía conocimiento del "estado de abandono y deterioro" de este inmueble y se había producido la "correspondiente denuncia ante la Policía Local de un particular, el 1 de febrero de 2008".
Añade que habían tenido lugar "visitas técnicas" al inmueble y se había concedido "el preceptivo trámite de audiencia", así como la "puesta en conocimiento del hecho a la Consejería de Cultura, por tratarse de un inmueble protegido por el PGOU, al encontrarse en el entorno del Acueducto de Los Milagros". Con todo esto, y "transcurridos unos meses sin recibir contestación, no es hasta julio de 2009 cuando se autoriza por parte del Consorcio a actuar en dicho predio".
Así, ante "nuevos informes técnicos" que ponían de manifiesto la "ruina inminente" del inmueble, el 29 de septiembre de 2009 se declaró el "estado de ruina inminente" de la vivienda y se ordenó a los propietarios que, "en el plazo de diez días, se proceda a la demolición de la cubierta y la primera crujía, que amenaza con derrumbarse".
El ayuntamiento explica que "como quiera que el edificio vuelve a empeorar con las últimas lluvias y ante la situación de peligro" decidió actuar "de urgencia en aras a la seguridad pública e integridad de las personas" y procedió a ejecutar, "de oficio y con cargo a la propiedad", la demolición de lo "estrictamente indispensable para su salvaguardia, los días 20 y 21 de octubre". "Aunque de forma previa se intentó contactar con todos los propietarios por vía burofax".
