La situación no es alarmante, pero sí es conveniente actuar. El alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, anunció ayer que el ayuntamiento aprobará en la Junta de Gobierno Local un plan específico de medidas «concretas» para limitar el uso del agua en las zonas públicas. A pesar de estas restricciones, Osuna aseguró que el consumo de agua «no corre ningún riesgo» en la ciudad y, por lo tanto, no se limitará el servicio en los hogares, ya que Mérida no se encuentra «en alerta» y, además, tiene embalses próximos.
El regidor municipal informó en rueda de prensa de que por parte del consistorio emeritense ya se están ejerciendo algunas «medidas más inmediatas» como el corte del agua en algunas fuentes públicas que no lleven circuito cerrado y la restricción del riego en zonas verdes. Para ello, el gobierno municipal se puso en contacto con la empresa suministradora de agua, Aqualia, y con la empresa encargada del servicio de la jardinería en la ciudad.
Sobre este asunto, Osuna explicó que el ayuntamiento recibió a mediados de noviembre la carta enviada por la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) para las poblaciones de más de 20.000 habitantes, en las que recuerda a los ayuntamientos la necesidad de que activen sus Planes de Emergencia ante la sequía registrada por la falta de lluvias.
En este sentido, el alcalde destacó que se trata de un «problema» del Gobierno central y de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, puesto que «la responsabilidad es de ellos». En cualquier caso, el Ayuntamiento de Mérida «intentará paliar y evitar los efectos negativos de la sequía» actuando en los espacios públicos, que es donde «únicamente» tiene competencias el consistorio.
El primer edil lanzó un mensaje a los ciudadanos para que sean «prudentes y responsables» en el gasto del agua e intenten controlarlo, tras lo que reiteró que «no hay ningún riesgo para la ciudad de Mérida», aunque «hay otras zonas de Extremadura y de España que sí están en alerta». «Es un problema nacional que afecta a todas las cuencas del país, pero todos debemos ser responsables con el consumo racional del agua, ya que afectará igualmente a la factura de los vecinos y vecinas», puntualizó el alcalde.
Cabe señalar que la CHG se ha dirigido por escrito a los ayuntamientos y mancomunidades de más de 20.000 habitantes para recordarles la necesidad de que activen sus planes de emergencia ante la «escasez de recursos hídricos», así como de que comuniquen las medidas de ahorro de agua que se vayan realizando.
