La Junta de Gobierno Local ha comunicado a los servicios municipales de Infraestructuras y Obras, Policía Local, Gerencia de Urbanismo, Gabinete Jurídico y Secretaría General la "necesidad de extremar las medidas de control en los expedientes de concesión de licencias de pubs, discotecas y locales similares, así como en la vigilancia y control de su posterior funcionamiento". Así aparece recogido en el acta de la reunión del gobierno local del pasado 26 de abril, en la que se asegura que el acuerdo se estableció "tras una amplia discusión sobre el asunto".

El equipo de gobierno considera "problemático" aspectos como "los importantes aforos los fines de semana" y los "horarios, ruidos y consumo de alcohol" de estos establecimientos que "afectan a la seguridad ciudadana", según la reseña de la reunión.

MULTIPLES QUEJAS En este sentido, los últimos datos de la Asociación Extremeña en Defensa de los Afectados por el Ruido (Aedar) de Mérida aseguran que los vecinos de la zona centro de la ciudad presentan una media de 250 denuncias al año por exceso de ruidos y por el incumplimiento del horario de cierre de los locales de copas, cifra que se duplica sólo durante los días de la feria de septiembre.

Esta asociación, creada a finales del año 1999, recibió únicamente en los dos primeros días de puesta en marcha un total de ochenta denuncias por estos conceptos, según comentó en su momento la presidenta del colectivo en Mérida, Maribel Fernández.

El asunto ha sido objeto reiterado de críticas y enfrentamientos entre el equipo de gobierno y este colectivo, que incluso ha denunciado la labor del ayuntamiento en los tribunales.