La empresa Nueva Rumasa ha cumplido su promesa de trasladar el domicilio social y fiscal de Carcesa de Cataluña a Mérida, tal y como comunicó el empresario jerezano cuando adquirió la fábrica el pasado mes de marzo.

En realidad, el domicilio social estaba a nombre de la empresa Kraft Food en Barcelona y ahora está en Mérida, donde la empresa pagará sus impuestos.

El alcalde Angel Calle indicó que esta medida es muy importante desde el punto de vista económico y de imagen, ya que los productos vuelven a lucir el nombre de Mérida en sus envases.

El traslado del domicilio social fue comunicado ayer por el empresario jerezano José María Ruiz Mateos tras la reunión mantenida con el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, a la que siguió otra con el alcalde.

José María Ruiz Mateos, que estuvo acompañado por uno de sus hijos, que es consejero delegado de Nueva Rumasa, manifestó que han introducido una serie de mejoras en Carcesa, como la de aumentar el equipo comercial con 10 nuevas personas y confeccionar una campaña de publicidad fuerte. "Ahora se está poniendo la inversión necesaria para potenciar la compañía y darle fuerza", manifestó.

COMITE También contó que lo primero que hizo cuando adquirió Carcesa fue la de reunirse con el comité de empresa, al que anunció el pago de una paga extra a los trabajadores.

En este sentido, manifestó que se ha llevado una sorpresa muy "grata" por la plantilla, "que nos parece muy competente, válida y con mucho entusiasmo".

Además dijo que se reunieron con los representantes de los trabajadores para informarles de primera mano que no se iba a hacer una regulación de empleo, "ya que cuando llevan tanto tiempo trabajando y hay un cambio en la propiedad, somos los primeros en contactar con los comités de empresas para evitar los agobios del temor a perder el empleo".

En cuanto a la reunión con el alcalde, Ruiz Mateos también le expresó el deseo de ser uno de los patrocinadores del festival de teatro de Mérida.