El Sector de Justicia de CCOO denunció ayer deficiencias en el nuevo Juzgado de Primera Instancia y Cuarto de Instrucción de Mérida, inaugurado el 30 de diciembre, ya que, según el sindicato, no tiene calefacción, carece de señales indicativas, no tiene fax, y se han tenido que colocar cartones en las ventanas para evitar las miradas de los ciudadanos desde la calle, entre otras carencias que impiden el desarrollo diario y normal de la actividad de los trabajadores.

El sindicato asegura que los propios funcionarios "han tenido que llevar calefactores de sus propias casas" para paliar el frío, aunque uno de los trabajadores está dado de baja por bronquitis. Además, se queja de que, a pesar de que hay dos despachos amplios vacíos, tanto la Sección Civil como la Penal ocupan dos salas de doce metros cuadrados donde se ubican siete mesas, sillas, armarios y demás mobiliario, "y los agentes judiciales están ubicados en el pasillo, donde les da de lleno la corriente de aire de la calle".

NI VIGILANTES NI PAPELES

CCOO también denuncia la falta de vigilancia y de seguridad, así como material de oficina para trabajar con normalidad, cortinas, fax, "ni tan siquiera papel poder utilizarlo en la tramitación de asuntos".

El sindicato culpa de la situación al gerente territorial del Ministerio Justicia en Extremadura, y pide su dimisión por su "ineficacia y torpeza".