El 20% de las obras que se construyen en la ciudad se inician sin el permiso municipal correspondiente. La tendencia se ha repetido en los últimos tres años, período en el que la policía local ha inspeccionado 1.039 construcciones, de las que 210 han sido denunciadas por carecer de licencia. El consistorio ha argumentado siempre que en la mayoría de los casos se trata de edificaciones pequeñas en casas particulares, y achaca el incumplimiento de la normativa al desconocimiento de la misma por parte de los propietarios.

Para que se inicie una obra, el promotor debe tener una licencia del ayuntamiento y que, según el presupuesto, tiene un coste distinto, que oscila entre los apenas 31 euros para edificaciones que no superen los 3.005 euros, hasta los más de 600 que hay que pagar cuando las obras tienen un presupuesto superior a los 601.012 euros.

MENOS INSPECCIONES Sin embargo, año tras año han sido menos las obras inspeccionadas por los agentes y, en proporción, menos las denunciadas. Así, en el 2003 fueron denunciadas 106 de las 390 construcciones visitadas; 44 en el 2004, fecha en la que se inspeccionaron 290 edificaciones, y 60 de las 359 obras controladas el pasado año.

Fruto de esas inspecciones se han paralizado 67 obras en esos tres años (34 en el 2003, 19 en el 2004 y 14 en el 2005).

El ayuntamiento trata ahora de evitar con estas actuaciones de los agentes que se vuelvan a levantar construcciones ilegales como las de El Vivero y Proserpina, donde cientos de ciudadanos han vivido en una zona de uso dotacional y no residencial.

Otro aspecto contra el que lucha el consistorio es la parcelación ilegal para lo que prevé sanciones de hasta 150.000 euros.