El comedor social de Mérida reparte 70 comidas y cenas diarias de lunes a viernes a familias sin recursos, de las cuales 30 están destinadas a niños y a personas que no se pueden desplazar hasta el comedor.

La delegada de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Mérida, Ana Blanco, ha indicado en rueda de prensa que desde el 20 de diciembre que se inauguró el comedor social hasta el 31 de mayo se han ofrecido 6.611 comidas, tanto para adultos como para niños.

Una de las encargadas del funcionamiento del comedor social, la hermana Estela, ha explicado que, para poder tener acceso al comedor social, el demandante tiene que acudir primero a la parroquia del barrio donde resida y, una vez allí, se estudia el caso y si "verdaderamente" esta persona está "necesitada para comer", Cáritas la manda al comedor social con una ficha identificativa que le permite disfrutar de los servicios.

Aparte de la ficha para la comida, a los usuarios del comedor se les entrega otra acreditación para que puedan coger el autobús urbano de forma gratuita y puedan acudir a comer a la hostería, ya que "está un poco apartada" del centro de la ciudad.

Además, la hermana Estela ha añadido que hay más de 400 socios, que pagan una cuota de cinco euros al mes, pero se "necesitan más", ya que "la comida está muy cara" y desde el comedor social se pretende dar la cena también, aunque de momento los recursos dan para ofrecer bocadillos y latas de conserva.

También ha señalado que hay personas sin ninguna vinculación con el comedor "que llevan frutas y carne" de forma altruista, por lo que cree que "Mérida entera está detrás" del comedor social.

OTROS SERVICIOS

Además, el comedor social tiene abierto desde el 5 de mayo el servicio de ropero, donde cualquier persona puede llevar la ropa que no use para que la puedan disfrutar otras personas. Asimismo, la persona sin recursos que necesite ropa puede acudir al mismo comedor a pedirla.

Después de la cena, las personas también pueden disfrutar de las duchas que se han habilitado en el comedor social para las familias sin recursos que no puedan ducharse en sus casas "porque les han cortado la luz y el agua" y además, desde esta instalación "se les ofrecen las toallas y la ropa para cambiarse".

El centro social está abierto a partir de las 10,00 horas para que las personas que acudan a comer "pueden estar distraídas" ya que allí pueden para leer revistas y periódicos y ver la televisión, ha afirmado la hermana Estela.

USUARIOS

Los usuarios de este recurso son familias que "antes de la crisis tenían un nivel económico aceptable", ha indicado la delegada de Asuntos Sociales del ayuntamiento, Ana Blanco.

Por otra parte, la hermana Estela ha señalado que intentan que todas las personas que acuden allí formen "una familia", y ha destacado que a veces ayudan a los voluntarios en las tareas del centro.

El comedor cuenta con una red de voluntarios que están repartidos en cinco grupos de 11 personas, y cada grupo va un día de la semana a ayudar en las diversas tareas que se hacen en el centro social.

CENTRO DE VERANO PARA NIÑOS

A preguntas de los periodistas sobre los centros de verano para que los menores puedan recibir una alimentación correcta, la delegada de Servicios Sociales del ayuntamiento, Ana Blanco, ha contestado que el consistorio "no tiene esas competencias", ya que se organiza "a nivel regional", con "más herramientas y más posibilidades".

A este respecto, también ha recordado que el año pasado la apertura de los comedores escolares en verano, por parte del Gobierno regional, ya tuvo lugar, con una participación de 400 niños en toda la región, y este año ha añadido que "se ha vuelto a estudiar" la posibilidad de abrir colegios para organizar actividades para los niños, aparte de las comidas.

Por último, Blanco ha asegurado que "desde el año 2008 existe la pobreza infantil y la crisis" y "casualmente el PSOE no hizo absolutamente nada por atender a los menores", con un índice de pobreza en esta etapa "elevado, incluso más que ahora".