Desde que saltó la crisis en la empresa mixta Gasmer, a mediados de mes, el socio mayoritario, el ayuntamiento, ha presentado dos querellas criminales en el Juzgado de Instrucción contra el socio minoritario y gerente de la empresa, Roberto Vázquez. La primera, el pasado 15 de octubre, y la segunda, ayer.
Las dos querellas fueron interpuestas en nombre del Consejo de Administración por los consejeros de Gasmer, Gonzalo García de Blanes, Miguel Valdés y Manuel Gámez por los mismos motivos: presuntos delitos societario, administración desleal, apropiación indebida y estafa.
Miguel Valdés explicó que en la querella presentada ayer se denuncia que Gasmer "está pagando el alquiler, el agua, la luz, el teléfono, el fax, la limpiadora, los gastos de la comunidad, la calefacción, la fotocopiadora tanto de sus oficinas como las que ocupa Extremadura 2000 y Hormigusa y se produce una confusión entre todas las empresas, tanto en los medios materiales como en los personales".
En esta denuncia también se incluye que "el Audi de Juan Antonio Galán lo ha pagado Gasmer, mediante el giro de dos facturas que emitía Extremadura 2000 del Aguas, y que los vehículos de Gasmer lo usaban trabajadores ajenos a ella y pertenecientes a sociedades que mayoritariamente participa y domina Roberto Vázquez, como un Renault Clio 1.9, que pertenece a Gasmer y conducían y usaban trabajadores de la empresa de Roberto Vázquez, o la furgoneta Ford Transit basculante que utilizan operarios de las empresas que hacían la obra civil que pertenecían igualmente al entorno de Vázquez".
En cuanto a la querella del 15 de octubre, se basa en la petición de Vázquez de dos préstamos bancarios de 900.000 euros cada uno, avalados por Gasmer.
