Mérida ya cuenta con otro atractivo más en su conjunto patrimonial. El Ayuntamiento ha acordado la cesión de un terreno con restos arqueológicos de termas públicas al Consorcio, con el fin de que sean preparadas para su visita.

Los restos arqueológicos de los terrenos cedidos al Consorcio, situados en la Travesía de la Rambla junto a la calle Santa Eulalia, aparecieron en unas excavaciones durante el 2001 y el 2002. "Son unas termas públicas. Este era un elemento que nos faltaba en el conjunto de monumentos de la ciudad. Teníamos otras termas, pero más limitadas, eran pequeños negocios. Estos nuevos restos que vamos a consolidad, además están en un punto muy bueno, dentro del recorrido que realizan la mayoría de turistas" explica el director científico del Consorcio, Miguel Alba, en declaraciones a EL PERIODICO.

La intención del Consorcio es preparar el conjunto de las termas públicas cuantos antes. La iniciativa se realizará dentro del proyecto Mecenas , y se dispone de 30.000 euros de inversión aproximadamente. Se prevé que las obras se inicien entre los meses de septiembre y octubre, haciendo en una primera fase una pequeña excavación para retirar tierras y el cierre de paneles explicatorios, sobre la función de las termas en la sociedad romana y los restos arqueológicos del lugar. También se procederá a la consolidación, limpieza, y eliminación de la vegetación. Miguel Alba explica que después "quedaría una segunda fase, porque hay restos en la parte baja de un edificio que ya están excavados, pero queda integrarlo y limpiarlo. Aunque eso se hará cuando se dispongan de fondos, desde el proyecto Mecenas".

Como Miguel Alba señala, "en las excavaciones en terrenos de particulares, los restos arqueológicos encontrados pertenecen al ayuntamiento. Una vez que se decide si deben ser integrados en el conjunto arqueológico de la ciudad, el Consorcio debe solicitar la cesión del terreno al ayuntamiento.". Con los restos de la travesía de la Rambla todavía no se había pasado por ese trámite, que fue iniciado a principios del 2010 cuando el Consorcio solicitó la concesión, que finalmente se ha decidido en la última junta de gobierno del consistorio.