El paso para vehículos y peatones bajo el acueducto de San Lázaro, en la calle del río Albarregas, será modificado para solucionar el problema que actualmente representa para la seguridad vial. Pero también, aunque en este caso a más largo plazo, para el tráfico de la zona, que en los próximos años se verá notablemente incrementado con la puesta en funcionamiento del Palacio de Justicia, de la Comisaría de Policía, y la nueva sede de las consejerías de la Junta. Las dependencias de la futura ciudad administrativa atraerán cada día a este punto de la ciudad a miles de trabajadores y de ciudadanos para resolver sus trámites administrativos.

A día de hoy, tal y como fue construida esta infraestructura en el siglo XVI, este paso cuenta únicamente con un vano, que comparten los vehículos que transitan en ambos sentidos de la circulación, además de los peatones, que corren el riesgo de ser atropellados si no se toman las precauciones necesarias.

La construcción de medio millar de viviendas en los terrenos de Mérida III Milenio, donde anteriormente se asentaba la barriada de La Paz, ha incrementado considerablemente el uso de este paso en los dos últimos años, ya que conecta este punto con el centro de la ciudad. "Ahí existe un problema", señaló ayer Miguel Alba, director científico del Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida, quien confirmó que se está buscando la mejor opción para mejorar la seguridad "con la menor incidencia" para el monumento.

Alba concretó que los informes que se están realizando llevan una doble dirección. Por un lado se plantea la apertura de un nuevo vano, más pequeño que el actual, para el paso de los peatones. Esta opción sería más rápida, económica y garantiza una menor incidencia sobre el acueducto. Sin embargo, también se está valorando la realización de un nuevo vano --o ampliar el actual-- para dar cabida a dos vehículos, y resolver "de una tacada" el obstáculo que el monumento representa para el tráfico de una zona que espera una gran afluencia de vehículos y peatones en poco tiempo. En cualquier caso señaló que el proyecto se encuentra en fase de estudio y que aún no ha pasado por la Comisión Ejecutiva del organismo, que es la encargada de dar el visto bueno al mismo, por lo que no se ha podido concretar una fecha para la realización de la obra.

El alcalde de Mérida, Angel Calle, que se encontraba junto a Alba al ser preguntado por este asunto en la presentación de una actividad en el circo romano, señaló que el nuevo vano es "absolutamente necesario", aunque será el Consorcio el que decida la actuación.