El ayuntamiento ha contratado a 60 personas para prestar servicio de ayuda a domicilio a personas discapacitadas, dependientes y ancianos, que trabajarán durante un año una media de 25 horas semanales. Se trata de 46 auxiliares de ayuda a domicilio, seis de clínica, dos animadores sociales, cuatro trabajadores sociales, un terapeuta y una psicóloga.

Estos trabajadores ayudarán a unas 530 personas que necesitan de sus servicios en casa, donde les harán las tareas domésticas, le acompañarán donde necesiten y, en su caso, les prestarán atención sanitaria y de higiene personal.

Es un servicio de atención integral, que incluye, según la delegada de Servicios Sociales, Carmen Yáñez, cuestiones relativas al ocio y la cultura.