El viento, con rachas de más de 70 kilómetros por hora, arranca una de las cubiertas del aparcamiento del centro comercial Carrefour de Mérida, dañando una decena de vehículos, pero sin causar heridos. La imagen de la marquesina caída demuestra que fue un auténtico milagro que ninguna persona resultara herida, ya que la techumbre de esta zona del parking se desplomó completamente, según manifestaron testigos presenciales. Uno de ellos comentó: "Serían las doce del mediodía, yo salía de comprar cuando vi como la cubierta se dio la vuelta por completo y cayó sobre los coches".

Los vehículos afectados fueron retirados por efectivos de la policía local de Mérida y después los bomberos se encargaron de retirar, con la ayuda de una potente grúa, la marquesina dañada. Cabe destacar como la base de las columnas arrancadas sobre las que se sustentaban la marquesina estaban muy oxidadas, causa que pudo facilitar su desprendimiento.

Desde la empresa no quisieron hacer declaraciones a los medios de comunicación, mientras que algunos de los afectados se preguntaban cómo van a ir a su trabajo si no tienen coche. Lo cierto es que las compañías aseguradoras del centro comercial se encargarán de correr con los gastos de las reparaciones necesarias.