La Asociación Cultural Protectora de Animales de Mérida (Acudame) aseguró ayer que tiene sospechas de que las instalaciones de la perrera municipal no se adecuan a la ley, debido al déficit sanitario de las instalaciones y al elevado número de animales que acoge. Así lo explicó la portavoz de la asociación, María Luisa Prudencio, con motivo de la presentación oficial de la asociación, que nació a finales del año pasado y agrupa a más de un centenar de socios.

Prudencio reiteró que las instalaciones carecen de un botiquín de urgencia y de unos baños adecuados. Asimismo, denunció que los animales son expuestos a las temperaturas gélidas del invierno sin climatización y son lavados a primera hora de la mañana, lo que les puede crear problemas de salud.

Por otro lado, este colectivo destacó que no es adecuado llevar a la perrera los gatos que habitan en el Templo de Diana porque no tiene capacidad suficiente. Además, exige al alcalde de Mérida, Angel Calle, que depure responsabilidades sobre una supuesta desaparición de 300 gatos que habitaban en el 2005 en el yacimiento de Morerías.