El concejal delegado de Medio Ambiente de Mérida, Rafael España, ha estimado hoy que si los planes de seguridad y salud son correctos y el director de la obra considera que todo está bien, la próxima semana se procedería al derribo de los quioscos de la plaza de España.

En una rueda de prensa para presentar una campaña de protección medioambiental en las Ciudades Patrimonio de la Humanidad, el edil ha explicado que se mantiene reuniones con los contratistas y adjudicatarios para proceder al replanteo de la obra.

Este replanteo se refiere al vallado de la plaza de España y los futuros accesos a la obra, ya que tiene que ser compatible con la instalación de la carpa del carnaval y su desarrollo, ha precisado.

"Intentaremos que sea compatible desde el punto de vista de la seguridad, que es lo que prima por encima de otras cuestiones", ha agregado.

España ha recordado que existen dos contratistas para las obras, porque así lo ha querido los adjudicatarios, lo que complicará más la coordinación que si lo hiciera una sola empresa.

Por otra parte, ha confirmado que el ayuntamiento retirará mañana los pináculos del palacio de la China, situado también en la plaza España, después de que el administrador concursal del edificio dijera que no lo iba a llevar a cabo.

Así, la retirada estará coordinada con el Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida y los servicios técnicos de Urbanismo y Parques y Jardines, que contarán con el apoyo del Parque de Bomberos de la ciudad, para poder llegar con la escala al nivel superior.

Los pináculos se almacenarán para su posterior restitución una vez que el edificio tenga un propietario.