La policía nacional detiene a un hombre de 32 años tras robar en un supermercado de la ciudad amenazando con un arma blanca mientras que sus hijos, de 7 y 9 años, le esperaban en un coche estacionado en las inmediaciones. Según informó ayer la Policía Nacional en nota de prensa, un hombre entró en una tienda de alimentación ubicada en la avenida Lusitania ocultando su cara con un pasamontañas y armado con una daga de doble filo de unos 20 centímetros de hoja. Tras amenazar a la dependienta y a varios testigos, el arrestado «arrancó» la caja registradora y salió huyendo del lugar.
Hasta el lugar de los hechos se dirigieron rápidamente varias dotaciones policiales mientras que, a su llegada, los agentes fueron alertados por un ciudadano que señalaba con gestos a un varón que corría por la calle Vicente Aleixandre. Los agentes consiguieron cortar el paso a la persona que huía, a la que dieron el alto y que portaba la daga. Después de varios requerimientos los agentes consiguieron que esta persona depusiera su actitud, soltando el cuchillo y arrojándose de espaldas al suelo, procediendo a su detención como presunto autor de un delito de robo con violencia e intimidación.
Cuando los policías estaban poniéndole los grilletes al detenido, llegaron a lugar de los hechos dos menores de edad, de 7 y 9 años, quienes mientras lloraban llamaba a su padre. Los agentes, tras verificar que efectivamente eran sus hijos, se hicieron cargo de ellos, siendo trasladados hasta el domicilio familiar y entregados a su madre. En el interior vehículo, que fue intervenido, fueron hallados 1.395 euros en efectivo tirados en el asiento y en el suelo de la parte derecha delantera, presumiblemente procedentes del botín del robo.
El detenido es un varón de 32 años, sin antecedentes penales, el cual fue trasladado hasta dependencias policiales para la tramitación de las correspondientes diligencias, tras las cuales fue puesto a disposición judicial.
