La policía nacional ha desarticula un grupo criminal firmado por cinco jóvenes dedicado a la comisión de hurtos en establecimientos comerciales de Mérida para su venta posterior en el mercado negro, a los que les fueron intervenidas, entre otras mercancías, prendas por valor de más de 880 euros. También se les aprehendieron 30 botellas de bebidas espirituosas, un número considerable de productos alimenticios y de complementos para animales, según informó ayer la policía nacional en nota de prensa.

Las detenciones se produjeron el pasado día 11, cuando agentes de la policía nacional fueron enviados a un establecimiento comercial del polígono industrial El Prado donde el vigilante de seguridad tenía retenida a una joven que intentó salir en posesión de artículos valorados en 275 euros que no había abonado. La mercancía la llevaba oculta en una bolsa tras haberles quitado y desactivado los sistemas de alarmas.

A los cinco detenidos, un hombre y cuatro mujeres, se les ha imputado también un delito de pertenencia a grupo criminal, donde existe un claro reparto de tareas, ya que las mujeres entraban por separado a los establecimientos, de donde salían igualmente por separado tras hurtar los efectos. El varón únicamente ejercía de conductor, nunca entraba en los locales, siendo su función la de abonar la compra cuando alguna de ellas era interceptada en la salida por el personal de seguridad.