Agentes de la Brigada de Extranjería y Documentación de la comisaría de Mérida detuvieron el pasado 11 de mayo a una brasileña que responde a las iniciales A.D.C, de 29 años, por un presunto delito relativo a la prostitución, al regentar un piso en el que obligaba a ejercerla a otras mujeres de su mismo país.

En cuanto a la forma de actuar, la detenida captaba a las mujeres en Brasil, ofreciéndoles falsas expectativas de trabajo en España, y pagándoles los gastos de viaje hasta nuestro país, valorados en unos 1.300 euros.

Una vez en España, las alojaba en el piso, situado en la céntrica rambla Santa Eulalia, en el que, bajo amenazas graves, coacciones y agresiones, las obligaba a ejercer la prostitución hasta que le devolvieran una cantidad muy superior al dinero adelantado en concepto de préstamo, según las mismas fuentes.

Las investigaciones realizadas han determinado que esta actividad, que se venía realizando desde al menos hace dos años, ha afectado a varias mujeres.

El caso aún no está cerrado y no se descartan nuevas detenciones, ya que la policía baraja que podría tratarse de una red de inmigración ilegal destinada a la prostitución.

EL DESENCADENANTE Los hechos que han desencadenado la actuación policial se originaron en una intervención policial tras una denuncia por agresiones. La víctima, de 29 años, brasileña, se encontraba en este piso ejerciendo la prostitución a la fuerza. Incluso la habían amenazado con contar a su familia lo que hacía en Mérida, a donde había llegado engañada y como turista.

La detenida, que tiene los papeles en regla y que ya ha pasado a disposición judicial, no dejaba que su compatriota saliera sola de la casa.