El Centro Cultural Alcazaba estaba lleno en el pleno extraordinario que nombraba Hijo Adoptivo a Diego Galindo Bailón. Todos los miembros de la Coral Augusta Emerita, los actuales y muchos de los que ya no pertenecen a ella, pero que guardaron en lo más profundo un recuerdo entrañable de su paso por ella. Y nadie olvidó a los muchos que faltan y asistieron en espíritu, porque allí estaban todos.

El ambiente era de alegría y reconocimiento a una labor de muchos años. En el escenario perfectamente adornado se encontraban todos los miembros corporativos y los consejeros municipales designados al amparo de la Ley de Grandes Ciudades.

Palabras del concejal instructor del expediente, Francisco Robustillo; del portavoz del PSOE Angel Calle, y de la portavoz del PP, Pilar Vargas. El alcalde, Pedro Acedo, hizo, como los anteriores, una semblanza del flamante Hijo Adoptivo, de su paso por la ciudad volcándose desde el principio e integrándose, dirigiendo la Coral Augusta Emerita sin dejar un día los ensayos y viajando a toda la región y buena parte de Europa llevando el nombre de la ciudad a los más destacados escenarios musicales.

Diego Galindo muy emocionado, con lágrimas y sacando fuerzas de flaqueza, ante toda su familia, paisanos de Mengíbar (Jaén) y todo el público, que estuvo volcado con él. Fueron momentos que jamás olvidará. Apretones de manos, abrazos, felicitaciones y muchos regalos al nuevo paisano. En la noche del viernes, una cena homenaje en el hotel Las Lomas donde la emoción sobrepasó lo inimaginable. Enhorabuena emeritense.