Agentes de la Policía Nacional de la comisaría de Mérida han detenido a dos hombres que responden a las iniciales F.C.R., de 45 años, y M.A.G.S., de 39, a los que se les acusa de ser los presuntos autores de numerosos delitos de estafa y falsificación en Mérida y en diversas poblaciones pacenses, en las que intentaron sacar dinero de varios bancos presentando documentación falsa, cuyos originales habían sido robados.

Las primeras denuncias sobre este delito se produjeron en Mérida el pasado 24 de marzo, cuando responsables de dos sucursales de una caja de ahorros, ubicadas en las avenidas Juan Carlos I y Lusitania, informaron que dos individuos habían intentado realizar unos reintegros de efectivo, presentando para ello una documentación que ofrecía dudas sobre su autenticidad a los empleados.

COGIDOS IN FRAGANTI De forma inmediata se montó un dispositivo compuesto por funcionarios pertenecientes a las Brigadas de Seguridad Ciudadana y Policía Judicial de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Mérida que dio como resultado la localización de ambos individuos cuando intentaban efectuar un nuevo cobro en una entidad bancaria de la cercana localidad de Calamonte, donde fueron detenidos por funcionarios de la policía.

Una vez detenidos se pudo demostrar que dichos individuos utilizaban documentos de identidad sustraídos a sus titulares que posteriormente falsificaban, para con ellos obtener reintegros de sus cuentas.

Igualmente se ha podido determinar que estos individuos han cometido o intentado cometer también estas estafas en las localidades de Mérida, Don Benito, Villanueva de la Serena, Guareña, Puebla de la Calzada y Calamonte.

DILIGENCIAS De todo ello se han instruido diligencias por la Comisaría de Mérida y por los equipos de Policía Judicial de la Guardia Civil de Mérida y Montijo, así como por el puesto de la Guardia Civil de Guareña, pasando los detenidos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Mérida.

En cuanto al modo de operar de estos dos individuos, primero robaban por el procedimiento del descuido un DNI o un carnet de conducir, luego estudiaban a los dueños de esta documentación para comprobar cuáles eran las personas más solventes económicamente y con dinero en las cajas de ahorro o bancos.

Por último, falsificaban la documentación y con ella se iban a a entidades bancarias fuera de la localidad donde los propietarios residían.

Además, y con la intención de no levantar sospechas entre los empleados pedían sacar pequeñas cantidades de dinero.