Ecologistas en Acción Extremadura ha presentado alegaciones a la planta azucarera de Expacio Mérida, industria que a su juicio tendría «un notable impacto medioambiental, paisajístico, agrícola y económico». Según el colectivo, este polígono está destinado a «otros usos» y lamenta que desde las Administraciones públicas se aliente un proyecto «continuista de un modelo económico insostenible y fracasado que favorece a las grandes empresas».

Aunque es «consciente» de que hay un problema de desempleo en Mérida y en Extremadura, no cree que la solución sea «gravar a cooperativas y a pequeñas empresas para luego ofrecer exenciones fiscales a las grandes compañías como la azucarera».

La organización advierte que la planta generaría en Mérida «un impacto ambiental importante»: malos olores, aguas residuales, contaminación atmosférica y un gran consumo energético unido al «enorme trasiego de camiones». Todo ello teniendo en cuenta además que el azúcar es un producto que «no tiene ningún valor nutricional y cuyo consumo excesivo plantea problemas de salud». Por último, advierte que la actividad de la planta crearía un monopolio en torno al cultivo intensivo de la remolacha que acabaría por fijar los precios «en detrimento» de los intereses de los agricultores.