Nueva vuelta de tuerca a la polémica surgida tras la expulsión de María Antonia Sanmartín y Juan Luis Lara de Ciudadanos. La edil municipal explicó ayer que la decisión del Comité de Disciplina de la formación se ha basado en la "mala imagen y el desprestigio" que han ocasionado los ediles después de que la problemática interna entre ambos, que acabó en los tribunales, saltara a los medios de comunicación. A su juicio, no ha incumplido la carta ética y ha respetado los estatutos, al tiempo que acusó a los responsables del partido a nivel nacional de no haber intervenido para frenar el conflicto.

Sanmartín hizo estas declaraciones en una rueda de prensa en la que estuvo acompaña por el asistente del grupo y militante, Gonzalo Alesón, y a la que también acudieron una representación de concejales del resto de grupos de la corporación y del propio equipo de gobierno. Una vez más, la concejal reiteró su negativa a dejar el acta y aseguró que desconoce la intención de Lara, al que pidió que dé la cara, al igual que al coordinador regional, Cayetano Polo, y a la portavoz del grupo parlamentario, María Victoria Domínguez. Sobre este asunto, Polo manifestó que no quiere "entrar en el juego" y que prefiere mantenerse al margen, ya que considera que el partido de Albert Rivera "ha hecho lo que ha debido".

Con respecto a la situación actual de los dos ediles, cabe destacar que el partido ya ha comunicado su expulsión a la secretaría general del ayuntamiento, por lo que ya se podrá iniciar el proceso para que Sannmartín pase a ser concejala no adscrita, a pesar de haber presentado alegaciones a la resolución del expediente, mientras que en el caso de Lara se desconoce todavía su postura. Hasta entonces, la concejal sigue acudiendo al despacho del grupo y tiene pensado asistir al pleno del próximo miércoles.

Por su parte, Alesón acusó a las dirección regional y nacional de responderles a sus demandas y avisos con "mentiras y más mentiras", de desentenderse de Ciudadanos de Mérida, donde ni siquiera se ha creado la agrupación local. De hecho, aseguró que se están produciendo bajas de militantes activos y que al menos medio centenar de afiliados le han transmitido el rechazo ante las políticas que está llevando a cabo la formación naranja en la ciudad. "El objetivo de los responsables de arriba es acabar con Ciudadanos en Mérida y en Extremadura", puntualizó Alesón, que ya adelantó que no será concejal si se diese el caso, teniendo en cuenta que en las listas de la candidatura ocupa el cuarto puesto y si renuncia Lara, y la número tres no quiere el cargo, podría tomar el acta.