El cuerpo sin vida de J. A. A. F., de 77 años de edad, fue encontrado ayer por los bomberos en el interior de su domicilio, sito en el número 32 de la calle Pontezuelas. Se trata de un hombre muy conocido, pues trabajó como conserje de la antigua casa de la cultura en la calle Moreno de Vargas.
El fallecido vivía solo y, al parecer, no mantenía mucho contacto con sus familiares, por lo que fueron los propios vecinos quienes, al no dar signos de presencia durante la última semana, llamaron a la policía local para que tomara cartas en el asunto. Las ventanas abiertas, las hojas del árbol de su patio sin recoger, varios días sin pasar a por el pan y el periódico --era muy metódico-- les hizo pensar en lo peor, por lo que alertaron a la policía local.
Tras intentar dar con su paradero sin éxito, los bomberos entraron en el inmueble por una de las ventanas del primer piso, que estaban abiertas (es una casa de planta baja y un solo piso), para comprobar si estaba dentro. Su cuerpo permanecía tendido en la cama, lo que unido a que sufría una dolencia cardíaca y a que no presentaba signos de violencia, hace pensar que se trata de una muerte natural. En cualquier caso, el asunto ya está en manos del Cuerpo Nacional de Policía.
