Técnicos de la Confederación Hidrográfica del Guadiana están elaborando un proyecto para suprimir la escalera metálica que une la barriada de Santa Catalina y la barriada de San Luis a través del acueducto de San Lázaro y hacer una puerta peatonal.

Este proyecto sustituye al original, que preveía dejar la escalera metálica y construir unas rampas, de unos 50 metros de longitud, para facilitar el paso a los coches y sillas de rueda y de las personas mayores que no pueden subir escalones.

El director del Consorcio de la Ciudad Monumental, Pedro Mateos, manifestó que la puerta que se hará en este acueducto del siglo XVI ajustará el proyecto de Confederación y las demandas de los vecinos de la barriada de Santa Catalina, que pedían la supresión de la escalera, "sólo se hará un corte en la piedra para poder vincular las dos barriadas, ya que el acueducto rompe totalmente las relaciones, cuando son dos barriadas que comparten muchos servicios. La ciudad está, en este caso, por delante", señaló.

Las medidas de la puerta que se abrirá en el acueducto cumplirán la ley de accesibilidad, por lo que será entre 1,20 de ancho por 2,10 de alto.

Además señaló que tanto la escalera como la rampa que se iba a construir son elementos que distorsionan la visión de este monumento.

Mateos destacó la implicación de todos los afectados en el proyecto, como la Confederación Hidrográfica del Guadiana, el ayuntamiento, la Consejería de Cultura, el Consorcio y la Asociación de Vecinos de Santa Catalina, que se encuentra en fase de aprobación en Madrid.

El proyecto también incluye un tratamiento ajardinado del área de influencia de la puerta que se va a abrir.