El exgerente de la empresa de transportes, Prudencio González, no quiso pronunciarse ayer sobre todas las presuntas irregularidades que han vuelto a salir a la luz sobre su gestión, y señaló que dará su versión cuando se recupere de los problemas de salud que sufre.

CCOO, por su parte, tacha de "barbaridad" que reclame 205.000 euros de indemnización por despido.

El equipo de gobierno reiteró que usará incluso la vía penal para esclarecer los hechos, y aclaró que no acudió al acto de conciliación por consejo del gabinete jurídico, ya que hacerlo sería aceptar sus condiciones.