Cada facultativo del centro de salud de San Luis atiende a unas 1.800 cartillas, cantidad que entra dentro de la ley, aunque la intención del Servicio Extremeño de Salud (SES) es que ese margen se sitúe entre los 1.600 y los 1.700.

Así, cuando el centro tenga un médico más, se dividirán las tarjetas y se establecerá un nuevo cupo de pacientes por facultativo.

Sobre esta cuestión, los médicos dicen que están, "prácticamente todos, en el cupo máximo permitido", con "acumulación de consultas y otras funciones cuando un profesional está ausente", denunciaron hace unos días.