La familia de un vecino de 40 años, fallecido el sábado, denunció ayer que la falta de nichos nuevos en el cementerio impidió que se pudiera enterrar en uno nuevo y recibiera sepultura en otro donde está enterrado su padre. Según un familiar, el domingo al mediodía les comunicaron que no había nichos libres, cuando el entierro estaba fijado para las siete de la tarde.

Para la familia, esta circunstancia es "vergonzosa", cuando, además, "pagaba un nicho desde los tres meses de edad".