La familia de Román García de Blanes y Osorio, que vino de Lugo y se estableció en Mérida a finales del siglo XIX, es conocida por toda la ciudad. Román se casó con Margarita Pacheco y Lerdo de Tejada, y tuvieron varios hijos que han ocupado muchas páginas en la historia de Mérida.
Han pasado varias generaciones y el patrimonio se ha conservado intacto, incluso ha aumentado ya que han ido cuidándolo.
LA DESCENDENCIA Del matrimonio de Román Garcia de Blanes y Margarita Pacheco nacieron varios hijos. Román García de Blanes y Pacheco se casó con Dolores Claros, enviudó y volvió a casarse con Conchita Velasco. Román fue concejal y propició la puesta en marcha del Parador Nacional Vía de la Plata; Gonzalo, se casó con Matilde Contreras y Solís, nació en Granada en el palacio de las Columnas, hoy es la sede central de la universidad. Entre los muchos títulos de la familia tenía el marquesado de Valentina, muy rica que vivió siempre en Mérida en la casa de la calle Alfonso IX, hoy Almendralejo, y que murió en el año 2004 a la edad de 102 años.
Donde vivieron varias generaciones se demolerá para hacer viviendas. Se realizan excavaciones en los jardines de la casa que tiene una extensión de 5.500 metros cuadrados. Habrá mil aparcamientos, viviendas y locales comerciales. Gonzalo terminó la carrera de ingeniero industrial pero su vocación era militar y fue coronel de Artillería. Sus hijos han vivido todos en Mérida, en esta casa que es la más grande de la ciudad y cuya extensión, con todo el entorno de jardines y viviendas de empleados, era de 25.000 metros cuadrados. En el mismo centro de la ciudad, cogía la manzana de la actual calle Almendralejo, Vespasiano y Marquesa de Pinares. En esta zona es donde está ubicada la torre de Mérida, el edificio más alto de la ciudad con 15 pisos de altura.
Otro hijo, Antonio, una gran persona, murió en accidente de tráfico cerca de Fuente del Maestre, donde fue enterrado. Además, Fernando, campeón de España de Tiro de Pichón, es el único que vive con sus hijos y nietos en Mérida. También es hijo Alonso, ingeniero naval que vive en Madrid pero pasa grandes temporadas en Venezuela, de donde es su esposa. Además, otra de las hijas del matrimonio Román y Margarita fue Margarita que se casó con Francisco López de Ayala de la Vera, alcalde al final de la década de los veinte y en los primeros años de los treinta, muy apreciado y querido, tiene, a la terminación de la Rambla de Santa Eulalia, un parque que lleva su nombre. Su hijo también estuvo muchos años de alcalde. Se trata de Francisco López de Ayala y García de Blanes, que estuvo al mando del ayuntamiento desde el 22 de octubre de 1957 hasta el año 1974.
Antonio no tuvo hijos; Pilar se casó con Miguel Martínez del Cerro, catedrático en la universidad de Cádiz, y Carlos contrajo matrimonio con Emilia Chico de Guzmán, nieta del duque de Ahumada.
La familia García de Blanes conserva íntegramente su patrimonio. La finca más emblemática, Pachena, se encuentra en Arjona (Jaén); pero también están las de Alberquilla, en Guareña; Las Abadías y Talantosa, en Mérida; Caballeros, en Badajoz; y La Vega de Toro, en Solana de los Barros.
Las raíces de la familia García de Blanes conservan su linaje desde hace más de cien años.
