El equipo de Gobierno cree que Fernando Molina está creando "alarma social" con sus declaraciones en torno a la revisión del catastro, a quien le acusa de desconocer que se ha aprobado el fraccionamiento del recibo del IBI en cuatro mensualidades para los contribuyentes que tenían domiciliado el pago del impuesto, y en dos mensualidades para el resto. Asimismo, recuerda que de las palabras de Molina se extrae que desconoce que también se ha aprobado una bonificación del 5% para quienes lo domicilien.

El equipo de Gobierno afirma que aprobó la bajada del tipo impositivo al considerar que la subida media del valor catastral era "asumible y razonable" tras catorce años sin revisiones. esta forma, destacó que el Ayuntamiento de Mérida acordó "no presentar alegaciones" porque le parecía que era una subida "asumible y razonable".