Un grupo de vecinos denuncia los planes de Endesa de abrir una nueva subestación eléctrica en la zona norte de Mérida cerca las promociones de viviendas y de una zona de especial protección de aves (ZEPA). Según recoge la agencia Europa Press, Francisco Folguera, representante de Los Verdes, y Álvaro Valverde, uno de los residentes afectados, alertan de los peligros que para la salud pública pueden provocar los campos electromagnéticos que generan los cables de alta tensión cuya instalación contempla el proyecto. Valverde, cuya vivienda se ubica en el trazado del tendido eléctrico, presentó alegaciones al proyecto hace unos dos años, y ahora espera que, aunque sea "en el último momento", el asunto adopte la repercusión entre los ciudadanos suficiente como para paralizar los planes de la compañía eléctrica, o al menos modificarlos. Según comenta, está previsto que la subestación eléctrica se construya en la zona norte de la ciudad, muy cerca de la promoción La Calzada, perteneciente al programa especial de vivienda conocido como Plan 60.000 de la Junta. Asimismo, el proyecto contempla la construcción de 17 torretas metálicas de 16 metros de altura que soporta seis cables de 66.000 voltios. El recorrido de este tendido discurriría entre la nueva subestación y la que la compañía eléctrica ya tiene en el polígono industrial El Prado, lo que conlleva que discurra "muy cerca" del casco urbano de la ciudad, así como cruzar el río Guadiana por el puente de la Autovía A-5, en un paraje de gran riqueza ornitológica y paisajística. En concreto, en este paraje, que se sitúa en la cola del embalse de Montijo, habitan unas 155 especies de aves, "muchas de ellas consideradas de interés especial por el catálogo nacional de especies amenazadas", y "la mayoría de ellas protegidas por varios convenios internacionales". Comenta que desconoce el plazo en el que empezará a funcionar la subestación, si bien explica que ha comenzado ha ejecutarse el proyecto por cuanto ya están levantadas varias de las citadas torretas. Por su parte, argumenta que tanto la subestación como el tendido eléctrico provocarán un fuerte impacto visual sobre la ciudad, pero sobre todo destaca que puede afectar a la calidad de vida de los vecinos. En concreto, se refiere a la existencia de estudios científicos que advierten sobre determinadas repercusiones sobre la salud. En concreto, citó "problemas de jaquecas, trastornos del sueño, e incluso alguna relación con la leucemia". Por su parte, Folguera destaca que no entiende cómo un proyecto de estas características ha sido tramitado como de "interés público" y anuncia que Los Verdes tratará de dar a conocer el proyecto entre la ciudadanía. En este sentido, espera que aumente la oposición ciudadana al proyecto para tratar de presionar a las autoridades con el fin de detener o al menos adecuar la redacción del proyecto para causar un menor impacto en el entorno urbano y medioambiental. Como propuesta, y en la medida en que el proyecto no pueda paralizarse, solicitan que al menos en la parte del trazado del los cables de alta tensión que discurre más cerca de las viviendas sea soterrado.