La consejera de Educación, Eva María Pérez, ha nombrado, en sustitución de Angel Benito en la secretaria general de Educación, a Felipe Gómez Valhondo. Durante años ha sido director del instituto Santa Eulalia con una profesionalidad digna de una persona que se preocupa por la enseñanza y que los alunmos se integren en el entorno.

El equipo que tiene en el centro es de tan actividad que ha ganado un prestigio que ha merecido las frases más laudatorias. Ha desarrollado la actividad más conocida de la ciudad en el aspecto del alumnado como es el Teatro Grecolatino en el Teatro Romano de Mérida donde miles de jóvenes y cientos de profesores vienen a Mérida a desarrollar sus aspectos teatrales dentro del mundo clásico.

Felipe Gómez Valhondo es de Trujillanos, un pueblecito cerca de Mérida y de una familia entrañable. Su hermano Valentín es un magnífico escultor de la madera y ha hecho varias exposiciones vendiendo todas sus obras. Como curiosidad familiar, dos hermanos son concejales en Trujillanos, uno pertenece al PSOE Valentín y la otra, Ana, es independiente en el PP. Se llevan bien, vamos, que no se le ocurra a nadie criticar de mala forma a uno de los hermanos que acaban con la política, lo primero es la familia y eso lo han mamado en casa donde sus padres han sido un matrimonio ejemplar y me une a ellos una gran amistad y se merecen los hijos que tienen, hasta un joyero, Salvador, por si acaso.

La consejera ha acertado de pleno. Se lleva un buen pastel educativo a su equipo. Felipe es mucho Felipe y es una guinda que ya quiso probar Pedro Acedo.