Los técnicos de la empresa Cóndor Georadar encontraron a última hora de la tarde del miércoles, y después de tres días sin hallar nada, fragmentos de huesos y casquillos de balas en la tapia sur del cementerio, cerca de los aparcamientos y en la zona donde ya aparecieron en junio restos del mismo tipo.

Luis Avial, uno de los técnicos, señaló que también tienen indicios de lo que pudieran ser unas fosas pequeñas y dispersas en una línea de 40 metros.

Respecto a los casquillos de balas, corresponden a munición de pistola del 9 milímetros largo y de fúsil tipo Máuser, de los utilizados en la guerra, de 7 milímetros.

Los datos recabados serán analizados ahora por ordenador y serán entregados al Grupo Aranzadi.