El arquitecto del ayuntamiento decidió ayer precintar un edificio de la barriada de San Lázaro tras sufrir un incendio en la madrugada del sábado uno de los pisos. Los bomberos tardaron dos horas en sofocarlo.
La dos familias que vivían en el bloque, que entre ambas suman 13 miembros, fueron realojadas en un hostal de la ciudad. La noche de ayer la pasaron en casa de familiares.
El fuego se originó en el bajo del bloque VII de la calle Plasencia sobre las dos de la madrugada del sábado. La vivienda estaba deshabitada. Se desconoce el origen del incendio. Las llamas afectaron a todas las habitaciones y, especialmente, al salón.
El calor y las llamas debilitaron el techo del piso, por lo que los bomberos recomendaron a las personas desalojadas que no accedieran a sus viviendas una vez apagado el fuego.
Las llamas también subieron a los pisos de arriba por el exterior, a través de unos paneles de plástico que recorren de arriba a abajo el bloque, y que sirven para dar sombra.
El consejero municipal Manuel Balastegui, junto con el arquitecto municipal, visitaron a primera hora de ayer el bloque y tomaron la decisión de precintar el edificio, lo que llevó a cabo la policía local.
El presidente de la Asociación para el Progreso de San Lázaro, Francisco Muñoz, y el vicepresidente, Manuel Vargas, se pusieron en contacto con la concejala de Bienestar Social, Mari Luz Calvo, para buscar una solución a las personas desalojadas, a las que se les ofreció un hostal.
Por su parte, Muñoz pidió a la Junta de Extremadura, propietaria de las viviendas, celeridad en el apuntalamiento del inmueble siniestrado por dentro, para evitar que se derrumbe y se pierdan los enseres de estas familias.
